Calentar el agua supone una buena parte del consumo energético de una casa. Es una necesidad casi constante -utilizamos el agua caliente para ducharnos, lavar la ropa, los platos y demás utensilios de cocina, e incluso para calefaccionar el agua de una piscina- y las necesidades van en aumento. Hasta el día de hoy, un calentador solar de agua es lo más ecológico, y a la larga económico, que podemos tener para calentar agua en un hogar.